La hacienda agrácola "Cà Di Gej" ("Ca di Yei") nació 1989 con la compra del terreno y de las edificaciones anexas, por parte del actual propietario. Estos terrenos fueron expropiados por el ayuntamiento de Génova para la construcción de un lago artificial que abasteciera la ciutad pero que, sin embargo, nunca llegó a realizarse. Tras veinte años de abandono, han llegado a convertirse en el corazón de una moderna hacienda agrícola con una producción totalmente biológica reconocida por el IMC.

En la hacienda se puede encontrar gran variedad de frutas, así como hortalizas, olivos y viñas además de diversidad de animales de granja como cerdos, vacas, cabras, caballos, conejos, gallinas...siendo utilizados en su mayoría para el consumo del agriturismo.

Las antiguas edificaciones, que tiempo atrás fueron casa de dos grandes familias de campesinos, han sido totalmente reestructuradas y dedicadas al uso agriturístico.